jueves, 26 de mayo de 2011

Entre líneas


Debido a distintas consultas recibidas en las últimas semanas, me parece que ha llegado el momento de aclararles: ¡Chicos no los odio! Todo lo contrario, los amo.
Son hermosos (algunos a su manera, claro está), son divertidos (porque creen que la vida es una joda), y sobre todo son distintos de nosotras, muy distintos.
Amo que sean tan pajeros, que no entiendan nunca que carajo quiero decir, que no sepan que queremos, que todos los días, a pesar de conocerlos de memoria, salgan con alguna cosa nueva que demuestra que, efectivamente, siempre se puede ser más pelotudo que ayer.
Como le dije a una amiga cuando me preguntó “¿A vos te gustan todos?” ¡Claramente que sí! Yo encuentro algo que amar en todos… a uno por estar mal de la cabeza, a otro porque está solo en el mundo, al de allá porque me hace reír como nadie, al de acá porque me hace llorar cada vez que puede, a ese por estar siempre drogado ¡y a aquél porque ni siquiera fuma!… una vez me enamoré de un tipo por el pelo que tenía, posta… no es joda…
Lo que más me gusta es que todavía no entienden que nosotras nos hacemos las boludas, no lo somos: nos mienten porque nosotras nos dejamos mentir, nos cogen porque nosotras nos dejamos coger ¿en que momento creyeron que era al revés?
No se tomen las cosas tan a pecho... en el fondo los queremos así, bien tarados.

1 comentario:

Anónimo dijo...

que linda que sos! pero si te gustan todos ya no sufras.. al menos que tampoco sufras.. que tarado me lo crei!!!