martes, 7 de junio de 2011

¡Quiero tener pito!


Leyendo los comentarios del día de ayer recordé el segundo momento mas difícil en la vida cotidiana de la mujer: Ir a un baño público.
Para todos los pelotudos que cada vez que vamos al baño juntas nos preguntan porque no podemos ir solas.
Para empezar, el baño es un lugar donde una puede correr mucho peligro, en especial si es un bar o un boliche; las mujeres en estos lugares de ponen agresivas, siempre hay alguna medio en pedo que empuja, grita o vomita y puede que alguna de nosotras estemos en el medio y, por poner cara de asco, nos comamos una trompada. Ni hablar si esto sucede en un pueblo o ciudad chica… cagaste, porque seguro que en el baño te cruzás con la mina a la que le robaste el novio y, con suerte, lo único que hace es putearte.
Una vez superada esta primera etapa viene el momento en el que te encontrás cara a cara con el inodoro, cada vez que estás ahí deseas haber nacido con un pito. Danzando entre una pierna y la otra porque te estás meando, tratás de encontrar un lugar donde dejar la cartera, el saco, la camperita y todas las pelotudeces que solemos llevar encima. Como el supuesto ganchito que debería colgar de las puertas no está, optas por colgar el saco de la cartera y te pasas todo eso por el cuello como su fuera un hermoso collar de cuarenta kilos.
Si entre todo este kilombo no te measte, lo hacés ahora… con la cartera colgando como un péndulo, tratando de mantener el equilibrio y que tu culo no toque la apestosa tabla donde todas las hijas de puta que pasaron antes que vos dejaron su firma porque no fueron capaz de embocar ni una gota. Y cuando creíste que lo habías logrado exitosamente te das cuenta que no hay papel; si tenés en tu cartera zafaste, y sino te jodiste, vas a pasarte toda la noche con la bombachita meada. ¡Ni hablar si te querés cambiar una toallita! Tenés que revolver en tu cartera, así, con todas las mierdas colgando y tratando de no caerte.
Para completarla, todo esto lo hacés mientras un montón de enfermas golpean las puertas y gritan : “¡Vamos, apurensé! ¿qué están haciendo?” ¡¡¡La paja me estoy haciendo hija de putaaa!!!! Ví todo el meo en el piso y me calenté, mi fantasía sexual es coger en un lugar tan hermoso como este ¿Qué voy a estar haciendo? ¡¿Sos tarada flaca?!
Conclusión: el baño es un lugar muy peligroso y estresante como para atrevernos a ir solas…

1 comentario:

kere (aka Eze) dijo...

JAJAJAJAJAJAJA! Sos tan vulgar, tan gráfica y tan grandísima zorra que te pongo Publicable y adhiero, siendo nene y homo, tampoco puedo ir al baño solo...me siento violado y necesito que alguien me acompañe al menos hasta la puerta. Tengo problemas para hacer del 1 (el 2 ni lo cuento xq es imposible) en lugares públicos.